¿Se acabó el sueño americano de tener casa propia?
Durante décadas, Estados Unidos vendió al mundo una promesa irresistible: trabaja duro, ahorra disciplinadamente y podrás comprar una casa propia. Tendrás la llave hacia la libertad financiera y un patrimonio para tu familia.
Esa promesa está rota.
Los números eran mágicos
Hasta hace poco, la fórmula parecía perfecta. Las tasas de interés promediaron 4.5% en los últimos 15, mientras en en México fue del 11.65% durante el mismo período. Esta era la base de la economía: rentar es más caro que comprar. Y así, cualquier trabajador podrían convertirse en propietario de un inmueble.
Robert Kiyosaki lo escribió en "Padre Rico, Padre Pobre": existía un "infinite money-glitch" al alcance de cualquiera con disciplina financiera. La receta era simple:
Ahorra para el enganche de una casa
Cómprala con una hipoteca al 3-4%
Réntala y deja que el inquilino pague tu hipoteca
Repite ad infinitum
Millones de estadounidenses se hicieron ricos siguiendo esta fórmula.
Pero luego, algo cambió.
Los números dejaron de funcionar
Los ingresos de la familia estadounidense promedio no crecen al mismo ritmo que los precios de las casas.
Según estudios de Harvard, en 2021 necesitabas ganar USD$79,330 al año para comprar una propiedad. En solo tres años, ese número se disparó 60% hasta alcanzar USD$126,670.
¿Qué pasó?
Tres fuerzas destruyendo el sueño americano
Falta de construcción:
La crisis financiera del 2008 quebró bancos y la confianza en la construcción. Al 2023 había un déficit de 4.7 millones de casas, suficiente para albergar a toda la población de Irlanda dos veces.
El gobierno contra su propia gente:
Mientras los políticos prometen hacer la vivienda “más accesible”, sus políticas cuentan una historia diferente: Los impuestos sobre propiedades han aumentado dramáticamente. En Florida subieron 50% del 2019 al 2024. Dallas, 33%. Las Vegas 32%.
Las políticas de Trump han agravado el problema. Los aranceles encarecieron los materiales de construcción, mientras que las redadas de ICE crearon escasez de mano de obra especializada.
Desastres naturales gracias al cambio climático
Las pólizas de seguro para vivienda han aumentado 74% desde el 2010 por un incremento en el número de desastres naturales. Como referencia, en Texas hubo 20 eventos climáticos extremos en 2024. En 2014 hubo 5.
No todo está perdido: la tecnología puede salvar el sueño americano, y quizás, el latinoamericano también.
El mercado de Inteligencia Artificial en construcción llegará a USD$12,000 millones para 2030 y por buenas razones. Las empresas ya están usando IA para:
Acelerando permisos de meses a días con IA
Un costo importante para los desarrolladores y constructores es el tiempo. Entre más tarda un proyecto en terminar, menor será el margen y, por lo tanto, tendrán que aumentar el precio del producto final.
El proceso de permisos de construcción es tan burocrático que puede tomar meses o años.
Permio.ai está reduciendo errores de solicitudes hasta en 90%, permitiendo que los proyectos empiecen 2X más rápido.
Optimizar costos
Es muy común tener “costos sorpresa” en el proceso de construcción, pero hay una creciente ola de herramientas con AI que ayudan a tener una mejor proyección y a identificar ahorros potenciales.
Procore desarrolló Helix Construction Intelligence, una plataforma que usa IA para analizar los datos históricos y con ellos hacer proyecciones más precisas de costos.
Actualmente estas proyecciones son manuales y, por lo tanto lentos y propensos a errores.
Estos avances no son promesas a futuro. Son realidades que están bajando costos, acelerando procesos y aumentando la productividad hoy.
La pregunta ya no es ¿cómo la IA va a impactar la industria de bienes raíces? sino, ¿cómo la vas a usar para crecer tu negocio y mantenerte a la vanguardia?
Fuente: Bloomberg